Creo que hay épocas donde la confianza juega contigo, siempre he confiado en lo que hago, pero hay cosas que se te salen de las manos, y que te provocan una sordidez creciente en tu interior, es esa pinche inseguridad, esa sensación de que la vida avanza hacia un abismo y que nada puede detener esa fuerza destructora que la acosa y la vida es así, a veces estas arriba y otras mas abajo…., todo cambia lentamente sin darte cuenta, de repente todos tus sentimientos están cargados por el resentimiento, el egoísmo y de alguna forma de estupidez. Confundido de tus decisiones tratas de buscar chivos expiatorios contra la condición precaria y miedosa en la que transcurre tu existencia.
Y estas a la espera de que pase esa especie de catarsis. esa experiencia interior purificadora, para poderlo superar esa época turbulenta. Pero lo que si estoy convencido de que solamente esos problemas llegan cuando te dedicas a hacer algo, y parte de eso, creo que salva el tema, cuando no haces nada, llegan otro tipo de problemas, creo que mas existenciales (en mi caso) o simplemente no pasa nada, sin ganas de aprender o entender sobre los demás, por prejuicios, desgana o desconfianza. Nos volvemos Incapaces de abrirnos a los demás y salir de nosotros mismos. Por eso, no sabemos nada de lo que ocurre más allá de nuestro entorno, por la simple razón de no querer saberlo, y eso me provoca una impotencia. Entonces pienso que es cuestión de actitud hacia las cosas que te rodean, más que solamente de tratar de no equivocarse, porque eso nunca va a pasar. Pero bajo las apariencias de un mundo que guarda las formas, tienes que enfrentarte a él de una forma poco ortodoxa para volver a creer en ti.
Y estas a la espera de que pase esa especie de catarsis. esa experiencia interior purificadora, para poderlo superar esa época turbulenta. Pero lo que si estoy convencido de que solamente esos problemas llegan cuando te dedicas a hacer algo, y parte de eso, creo que salva el tema, cuando no haces nada, llegan otro tipo de problemas, creo que mas existenciales (en mi caso) o simplemente no pasa nada, sin ganas de aprender o entender sobre los demás, por prejuicios, desgana o desconfianza. Nos volvemos Incapaces de abrirnos a los demás y salir de nosotros mismos. Por eso, no sabemos nada de lo que ocurre más allá de nuestro entorno, por la simple razón de no querer saberlo, y eso me provoca una impotencia. Entonces pienso que es cuestión de actitud hacia las cosas que te rodean, más que solamente de tratar de no equivocarse, porque eso nunca va a pasar. Pero bajo las apariencias de un mundo que guarda las formas, tienes que enfrentarte a él de una forma poco ortodoxa para volver a creer en ti.
2 comentarios:
Que onda negrito? como esta? Espero que no se me achicopale. Crecer duele y a veces la melancolía nos sume en inconmensurables reflexiones derivadas de una curiosa tristeza que a uno le da de estar lejos de las cosas que uno siempre ha querido. No se si sea lo que subyace a sus sentimientos, yo solo le hablo de mi propia experiencia en el exilio. A veces hace falta volver al origen para darse cuenta lo que uno ha avanzado, porque en el movimiento rectilineo uniforme de la cotidianidad uno puede llegar a creer que se encuentra estático.
Un abrazo
Pedro
Yo creo que muchas veces esto es bueno, porque al resurgir es con un avance muy marcado y de trayectorias definidas.
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